¡Buenas tardes a todos/as!
En esta ocasión, como cualquier docente, nos podemos encontrar con alumnos con los que nos damos cuenta que la actuación que estamos llevando a cabo no es la más adecuada para sus necesidades, ya sea por insatisfacción personal o porque simplemente el alumno/a en cuestión no está respondiendo como debería. Por ello, es primordial que seamos capaces de verlo y recapacitar. Esto pasa en mayor medida, si nos encontramos con alumnos/as con necesidades.
Consecuentemente, es necesario elaborar un listado de destrezas que requiere nuestro alumno, lo que realmente necesita, lo cual podemos realizar con la ayuda de su familia (ya que nos ofrece información primordial para el desarrollo óptimo del mismo) y así, podamos efectuar posibles cambios en nuestra práctica diaria con el fin de que esas destrezas que queremos que consiga, sean obtenidas y por tanto, el progreso y satisfacción tanto del alumno, como del grupo en sí, y la nuestra propia, sea real.
Por ello, os adjunto dicho listado que he elaborado teniendo en cuenta las destrezas necesarias para mi alumno y los cambios que he ido llevando a cabo a lo largo del curso.
Personalmente, considero que este listado de destrezas siempre estará en activo, es decir, que desaparecerán unas (por haber sido ya obtenidas) pero aparecerán unas nuevas, por ello, tenemos que estar siempre al pie del cañón y llevar a cabo, en la medida de lo posible, nuestra propia autoevaluación para darnos cuenta si realmente, lo que estamos haciendo, merece la pena o debemos cambiar algo al respecto.
Espero que os sirva de ayuda, porque en mi clase, desde entonces nuestro alumno ha conseguido muchos avances como por ejemplo los siguientes:
- Llama a la puerta antes de entrar.
- No se levanta de la silla cuando finaliza, puesto sabe qué debe hacer en cada momento.
- Modifica sus conductas inapropiadas.
- Comprende mejor las explicaciones.
- Disfruta del trabajo en grupo.
Por ello, os animo a autoevaluarnos, puesto que siempre podemos cambiar algo que está en nuestras manos.
Destrezas y cambios
jueves, 26 de abril de 2018
¿Qué es una buena práctica en la educación de personas con TEA?
¡Buenas tardes a todos/as!
Esta vez me encuentro ante un debate, y es que tras haber leído dos documentos "Una escuela para Juan (Arbea y Tamarit, 1999)" y "Autismo: modelos educativos para una vida de calidad (Tamarit, 2005)"; he podido sacar varias ideas claves que como especialistas en pedagogía terapéutica y docentes de este tipo de alumnado no nos puede sorprender del todo. Digo esto, porque realmente, aunque las cosas en ocasiones no se hacen como se deberían, todos sabemos lo que verdaderamente tenemos que hacer y también, lo que estos niños/as necesitan. Por ello, quiero compartir mis conclusiones sobre dichas lecturas:
1. Es primordial que la escuela contemple una carta de valores, como valor esencial, la consideración de la persona por encima de todo.
2. Hay que procurar llevar a cabo una planificación centrada en la persona, apoyarla para que desde su perspectiva, considerando sus deseos e intereses, y velando por su pleno desarrollo humano, pueda construir el futuro personal deseado.
3. Ciertamente, importa más la relación, la calidad en el día a día con estas personas que las tareas que en sí realizan. Esto no quiere decir que los aprendizajes que llevan a cabo no sean importantes, sino que a veces nos olvidamos de lo fundamental, de lo personal y esto, nos demos cuenta o no, es lo que prima para cualquier persona. A mí siempre me han dicho: "te recordarán por lo que eres, no por lo que haces" y es totalmente cierto...
4. Es importante, que la respuesta educativa a estos chicos/as se haga teniendo en cuenta sus necesidades pero siempre, fomentando la inclusión de los mismos; ya que los objetivos para todos serán los mismos pero la forma de alcanzarlos, las condiciones diferentes, ya que estos/as al igual que el resto, necesita determinadas ayudas y apoyos específicos.
5. Las respuestas educativas adecuadas se dan viviendo en sociedad, porque somos seres sociables que necesitamos de los demás. Por ello, estas personas se desarrollarán como personas entre personas, bajo la guía de personas.
6. Inclusión es compartir, no es solo aceptar tu presencia, aceptar que estás, sino aceptar "ser como se es" y disfrutar de ti, de mí, de nosotros.
7. La importancia de la significatividad, de ofrecer entornos significativos, no solo para estos alumnos/as (quizás ellos lo noten más) sino para todos/as... Hay que procurar cambiar esta sociedad, y ofrecer aprendizajes significativos, para que realmente los chicos aprendan sintiendo, aprendan valorando y aprenda creciendo de verdad.
8. ¡Cómo no! Tener en cuenta la gran importancia de las familias, ese gran apoyo (a veces desconocido) que es tan primordial para el desarrollo de nuestros/as alumnos/as. Debemos hacerles ver, crecer, y creer en sus capacidades y en que son uno más en este proyecto de educación que son sus hijos/as.
9.Por último y no menos importante, tenemos que tener siempre en cuenta que la diversidad enriquece, que nadie es igual a nadie, que todos somos diferentes y eso es lo bonito de la vida, que podemos aprender los unos de los otros, y que el estar juntos, nos hace ser mejores.
Todas estas conclusiones, las podéis encontrar reforzadas en el siguiente documento titulado "¿Qué es una buena práctica en la educación de personas con autismo? de AETAPI, la cual recoge bastante bien en base a ocho puntos centrales, los aspectos que debe tener en cuenta una escuela para ofrecer buenas prácticas educativas a los alumnos/as con TEA.
Espero que os sirva de ayuda, porque muchas veces, sabemos cómo tenemos que hacerlo pero simplemente, necesitamos un pequeño empujón para llevarlo a cabo.
Un saludo a todos/as.
Adjunto enlace donde os podéis descargar el documento.
¿Qué es una buena práctica en la educación de personas con autismo?
Esta vez me encuentro ante un debate, y es que tras haber leído dos documentos "Una escuela para Juan (Arbea y Tamarit, 1999)" y "Autismo: modelos educativos para una vida de calidad (Tamarit, 2005)"; he podido sacar varias ideas claves que como especialistas en pedagogía terapéutica y docentes de este tipo de alumnado no nos puede sorprender del todo. Digo esto, porque realmente, aunque las cosas en ocasiones no se hacen como se deberían, todos sabemos lo que verdaderamente tenemos que hacer y también, lo que estos niños/as necesitan. Por ello, quiero compartir mis conclusiones sobre dichas lecturas:
1. Es primordial que la escuela contemple una carta de valores, como valor esencial, la consideración de la persona por encima de todo.
2. Hay que procurar llevar a cabo una planificación centrada en la persona, apoyarla para que desde su perspectiva, considerando sus deseos e intereses, y velando por su pleno desarrollo humano, pueda construir el futuro personal deseado.
3. Ciertamente, importa más la relación, la calidad en el día a día con estas personas que las tareas que en sí realizan. Esto no quiere decir que los aprendizajes que llevan a cabo no sean importantes, sino que a veces nos olvidamos de lo fundamental, de lo personal y esto, nos demos cuenta o no, es lo que prima para cualquier persona. A mí siempre me han dicho: "te recordarán por lo que eres, no por lo que haces" y es totalmente cierto...
4. Es importante, que la respuesta educativa a estos chicos/as se haga teniendo en cuenta sus necesidades pero siempre, fomentando la inclusión de los mismos; ya que los objetivos para todos serán los mismos pero la forma de alcanzarlos, las condiciones diferentes, ya que estos/as al igual que el resto, necesita determinadas ayudas y apoyos específicos.
5. Las respuestas educativas adecuadas se dan viviendo en sociedad, porque somos seres sociables que necesitamos de los demás. Por ello, estas personas se desarrollarán como personas entre personas, bajo la guía de personas.
6. Inclusión es compartir, no es solo aceptar tu presencia, aceptar que estás, sino aceptar "ser como se es" y disfrutar de ti, de mí, de nosotros.
7. La importancia de la significatividad, de ofrecer entornos significativos, no solo para estos alumnos/as (quizás ellos lo noten más) sino para todos/as... Hay que procurar cambiar esta sociedad, y ofrecer aprendizajes significativos, para que realmente los chicos aprendan sintiendo, aprendan valorando y aprenda creciendo de verdad.
8. ¡Cómo no! Tener en cuenta la gran importancia de las familias, ese gran apoyo (a veces desconocido) que es tan primordial para el desarrollo de nuestros/as alumnos/as. Debemos hacerles ver, crecer, y creer en sus capacidades y en que son uno más en este proyecto de educación que son sus hijos/as.
9.Por último y no menos importante, tenemos que tener siempre en cuenta que la diversidad enriquece, que nadie es igual a nadie, que todos somos diferentes y eso es lo bonito de la vida, que podemos aprender los unos de los otros, y que el estar juntos, nos hace ser mejores.
Todas estas conclusiones, las podéis encontrar reforzadas en el siguiente documento titulado "¿Qué es una buena práctica en la educación de personas con autismo? de AETAPI, la cual recoge bastante bien en base a ocho puntos centrales, los aspectos que debe tener en cuenta una escuela para ofrecer buenas prácticas educativas a los alumnos/as con TEA.
Espero que os sirva de ayuda, porque muchas veces, sabemos cómo tenemos que hacerlo pero simplemente, necesitamos un pequeño empujón para llevarlo a cabo.
Un saludo a todos/as.
Adjunto enlace donde os podéis descargar el documento.
¿Qué es una buena práctica en la educación de personas con autismo?
martes, 10 de abril de 2018
Contrato con las familias.
¡Buenas tardes a todos/as!
Esta vez me encuentro ante la elaboración de un contrato para la consecución de determinadas conductas.
Precisamente este contrato que os enseño, lo he llevado a cabo con la familia de un alumno que no tenía adquirido el cepillado de dientes y que además, se negaba a hacerlo. Para ello, nos hemos "aprovechado" de sus motivaciones, al cual le encanta ir al cine los domingos, conducta que tiene como rutina. Por ello, se ha elaborado un contrato en el que se le ha informado que para poder ir al cine los domingos, antes debe realizar una conducta deseada, la cual es el cepillado de dientes.
Si el alumno, en casa, realiza dichas conductas, se le irá poniendo el pulgar hacia arriba para que visualice que lo ha conseguido. Si ese día, o en ese momento, no realiza la conducta deseada, el hueco se quedará vacío.
En un primer momento, se ha dividido el contrato en siete días semanales, donde cada día tiene tres momentos para conseguir el pulgar (el refuerzo). Por tanto, el total de posibles refuerzos es de 21, y se le ha comentado al alumno, que en primer lugar, tendrá recompensa siempre y cuando obtenga 15 pulgares (para dar posibilidad de error). No obstante, se le ha informado que ese límite podrá modificarse.
De igual modo, esa conducta también es trabajada en clase, ya que después del recreo trabajamos el cepillado de dietes como parte del taller de habilidades para la vida diaria. Por ello, la seño también hace su registro de conducta, con una tabla exactamente igual que ésta pero con solo una fila (después del recreo) y quitando el fin de semana. De esta forma, el alumno sabe que la seño informará a sus padres de los resultados, para que cuando vaya al cine, si ha conseguido mayoría de pulgares, podrá obtener un cubo de palomitas de colores que tanto le gustan.
Como conclusión puedo deciros que desde entonces, nuestro chico viene a clase con sus dientes limpitos... no ha sido fácil pero la recompensa... ¡merece la pena el cambio! jejejeje
Por cierto, se ha hablado con la familia, el hecho de poder realizar contratos de mayor número de conductas, lo cual está en proceso para futuras ocasiones, una vez que éste tenga bien adquirido el funcionamiento de los contratos.
Os dejo dicho contrato para que podáis visualizarlo.
Contrato con las familias
Esta vez me encuentro ante la elaboración de un contrato para la consecución de determinadas conductas.
Precisamente este contrato que os enseño, lo he llevado a cabo con la familia de un alumno que no tenía adquirido el cepillado de dientes y que además, se negaba a hacerlo. Para ello, nos hemos "aprovechado" de sus motivaciones, al cual le encanta ir al cine los domingos, conducta que tiene como rutina. Por ello, se ha elaborado un contrato en el que se le ha informado que para poder ir al cine los domingos, antes debe realizar una conducta deseada, la cual es el cepillado de dientes.
Si el alumno, en casa, realiza dichas conductas, se le irá poniendo el pulgar hacia arriba para que visualice que lo ha conseguido. Si ese día, o en ese momento, no realiza la conducta deseada, el hueco se quedará vacío.
En un primer momento, se ha dividido el contrato en siete días semanales, donde cada día tiene tres momentos para conseguir el pulgar (el refuerzo). Por tanto, el total de posibles refuerzos es de 21, y se le ha comentado al alumno, que en primer lugar, tendrá recompensa siempre y cuando obtenga 15 pulgares (para dar posibilidad de error). No obstante, se le ha informado que ese límite podrá modificarse.
De igual modo, esa conducta también es trabajada en clase, ya que después del recreo trabajamos el cepillado de dietes como parte del taller de habilidades para la vida diaria. Por ello, la seño también hace su registro de conducta, con una tabla exactamente igual que ésta pero con solo una fila (después del recreo) y quitando el fin de semana. De esta forma, el alumno sabe que la seño informará a sus padres de los resultados, para que cuando vaya al cine, si ha conseguido mayoría de pulgares, podrá obtener un cubo de palomitas de colores que tanto le gustan.
Como conclusión puedo deciros que desde entonces, nuestro chico viene a clase con sus dientes limpitos... no ha sido fácil pero la recompensa... ¡merece la pena el cambio! jejejeje
Por cierto, se ha hablado con la familia, el hecho de poder realizar contratos de mayor número de conductas, lo cual está en proceso para futuras ocasiones, una vez que éste tenga bien adquirido el funcionamiento de los contratos.
Os dejo dicho contrato para que podáis visualizarlo.
Contrato con las familias
miércoles, 4 de abril de 2018
Tarea de refuerzo positivo. Apoyo conductual.
¡Muy buenas tardes a todos/as!
Esta vez, os traigo una actividad que llevo a cabo dentro del aula para poder aumentar las conductas positivas que quiero por parte del alumnado y consecuentemente, poder reforzarlas para conseguir una mayor aparición de las mismas.
Dicha actividad consiste en dejar claro qué conductas son premiadas, y a través de una tabla (bien visible para todo el grupo clase, ya que en mi caso me encuentro en un aula específica) ir recogiendo a través de estrellas quién ha ido alcanzando los objetivos.
Los/as chicos/as tienen claro de que las estrellas son entregadas una por día, de forma que el que mejor lo hace, será el ganador de la estrella diaria. Cuando han ido avanzando, el primero que logre llegar al final de la fila y que por tanto, rellene todo su hueco de estrellas, será el ganador/a de la tabla y por tanto, podrá obtener un premio sorpresa (cuyo premio es elegido por la tutora, siempre en función de los intereses y motivaciones del alumnado).
Sinceramente, es que esta clase es mixta, y no solo hay alumnos TEA, por lo que he de señalar que está dando grandes resultados ya que ¡todos quieren conseguir el premio!
Además, diariamente, al dar la estrella, tanto la seño como el resto de los compañeros elogian a su compañero/a premiado, para que tengan muy claro tanto el ganador como el resto, el motivo de haber ganado ese día. De esta forma, aumenta el compañerismo y la propia autoestima.
Os dejo una imagen para que podáis visualizar la tabla que utilizo, la cual la podéis encontrar en internet y da unos resultados estupendos... ¡os lo aseguro!
Un saludo a todos/as.
Esta vez, os traigo una actividad que llevo a cabo dentro del aula para poder aumentar las conductas positivas que quiero por parte del alumnado y consecuentemente, poder reforzarlas para conseguir una mayor aparición de las mismas.
Dicha actividad consiste en dejar claro qué conductas son premiadas, y a través de una tabla (bien visible para todo el grupo clase, ya que en mi caso me encuentro en un aula específica) ir recogiendo a través de estrellas quién ha ido alcanzando los objetivos.
Los/as chicos/as tienen claro de que las estrellas son entregadas una por día, de forma que el que mejor lo hace, será el ganador de la estrella diaria. Cuando han ido avanzando, el primero que logre llegar al final de la fila y que por tanto, rellene todo su hueco de estrellas, será el ganador/a de la tabla y por tanto, podrá obtener un premio sorpresa (cuyo premio es elegido por la tutora, siempre en función de los intereses y motivaciones del alumnado).
Sinceramente, es que esta clase es mixta, y no solo hay alumnos TEA, por lo que he de señalar que está dando grandes resultados ya que ¡todos quieren conseguir el premio!
Además, diariamente, al dar la estrella, tanto la seño como el resto de los compañeros elogian a su compañero/a premiado, para que tengan muy claro tanto el ganador como el resto, el motivo de haber ganado ese día. De esta forma, aumenta el compañerismo y la propia autoestima.
Os dejo una imagen para que podáis visualizar la tabla que utilizo, la cual la podéis encontrar en internet y da unos resultados estupendos... ¡os lo aseguro!
Un saludo a todos/as.
martes, 3 de abril de 2018
Programa de actuación para reconducir una conducta para que sea positiva
¡Muy buenas tardes a todos/as!
Esta vez comienzo con un plan de acción que he podido llevar a cabo en clase, para reconducir una conducta inadecuada hacia una adecuada.
Tras haber contemplado el historial de la conducta del alumno en cuestión, los antecedentes, la topografía, la función y la consecuencia de dicha conducta; decidí que la mejor forma de obtener conductas positivas era llevando a cabo una economía de fichas.
Por ello, anteriormente me reuní con el departamento de orientación de mi centro y con la familia, para informar de las conductas inadecuadas del alumno y de las otras conductas, adecuadas, que quería conseguir. Por ello, procuré informarme de los posibles "premios" que podía llevar a cabo, ya que siempre es ideal, intentar conseguir en la mayor medida de lo posible la motivación del alumno por conseguir algo, por cambiar... ¿y qué mejor forma de conseguirlo si él sabe que cambiando, que con pequeños esfuerzos, puede conseguir eso que tanto desea?
Por tanto, me puse manos a la obra, y realicé una economía de fichas, la cual la expliqué en clase, y todos la entendía a la perfección ya que al ser visual (con la ayuda de pictogramas) y por el hecho de estar, bien organizado (desde mi punto de vista) ocasionaba que la finalidad de dicha herramienta fuera captada a la primera.
Por ello, en primer lugar hice una tabla de registro de conductas (por horas) para que el alumno sepa que en todo momento se iba a tener en cuenta su conducta y que en cada franja horaria, iba a volver a tener una oportunidad para conseguirlo.
En segundo lugar, hay una pequeña comparativa de pictogramas con frases, donde el alumno tenga claro en todo momento, qué conductas son merecedoras de una cara alegre (conducta adecuada) o de una cara triste (conducta inadecuada). Así, según las conductas ocasionadas, el niño puede obtener una cara u otra.
En la tabla primera de control, la idea es contar todas las caras que ha obtenido a lo largo de la jornada diaria, y la que tiene mayor número de apariencia, es la cara del día. Así, en el tercer apartado, se visualizará un pictograma con cara alegre o cara triste (en función de si ese día ha tenido la mayoría de conductas inadecuadas o adecuadas).
Y por último, aparece una tabla de "canjeo de recompensas", el cual en función de los intereses y motivaciones del alumnado, el alumno podrá conseguir una cosa u otra. Este canjeo de recompensas es semanal, es decir, podrá obtenerlo al finalizar la semana y también, como podréis contemplar, aparece las consecuencias...y es que cuando hay una carita triste, se le quitarán dos caritas contentas.
De esta forma, el alumno ha conseguido mayor motivación por cambiar y hacer cada vez más conductas adecuadas para obtener más caritas alegres, ya que lo que quiere conseguir ante todo, es bailar con la seño y poder montar una coreografía de baile juntos! jejejejejej
¡Veremos a ver donde acabamos! Pero estoy segura, que si sale todo bien, será uno de los mejores bailes de mi vida...
Os adjunto una fotografía de la economía de fichas llevada a cabo en clase. Espero que os guste.
Un saludo a todos/as.
Esta vez comienzo con un plan de acción que he podido llevar a cabo en clase, para reconducir una conducta inadecuada hacia una adecuada.
Tras haber contemplado el historial de la conducta del alumno en cuestión, los antecedentes, la topografía, la función y la consecuencia de dicha conducta; decidí que la mejor forma de obtener conductas positivas era llevando a cabo una economía de fichas.
Por ello, anteriormente me reuní con el departamento de orientación de mi centro y con la familia, para informar de las conductas inadecuadas del alumno y de las otras conductas, adecuadas, que quería conseguir. Por ello, procuré informarme de los posibles "premios" que podía llevar a cabo, ya que siempre es ideal, intentar conseguir en la mayor medida de lo posible la motivación del alumno por conseguir algo, por cambiar... ¿y qué mejor forma de conseguirlo si él sabe que cambiando, que con pequeños esfuerzos, puede conseguir eso que tanto desea?
Por tanto, me puse manos a la obra, y realicé una economía de fichas, la cual la expliqué en clase, y todos la entendía a la perfección ya que al ser visual (con la ayuda de pictogramas) y por el hecho de estar, bien organizado (desde mi punto de vista) ocasionaba que la finalidad de dicha herramienta fuera captada a la primera.
Por ello, en primer lugar hice una tabla de registro de conductas (por horas) para que el alumno sepa que en todo momento se iba a tener en cuenta su conducta y que en cada franja horaria, iba a volver a tener una oportunidad para conseguirlo.
En segundo lugar, hay una pequeña comparativa de pictogramas con frases, donde el alumno tenga claro en todo momento, qué conductas son merecedoras de una cara alegre (conducta adecuada) o de una cara triste (conducta inadecuada). Así, según las conductas ocasionadas, el niño puede obtener una cara u otra.
En la tabla primera de control, la idea es contar todas las caras que ha obtenido a lo largo de la jornada diaria, y la que tiene mayor número de apariencia, es la cara del día. Así, en el tercer apartado, se visualizará un pictograma con cara alegre o cara triste (en función de si ese día ha tenido la mayoría de conductas inadecuadas o adecuadas).
Y por último, aparece una tabla de "canjeo de recompensas", el cual en función de los intereses y motivaciones del alumnado, el alumno podrá conseguir una cosa u otra. Este canjeo de recompensas es semanal, es decir, podrá obtenerlo al finalizar la semana y también, como podréis contemplar, aparece las consecuencias...y es que cuando hay una carita triste, se le quitarán dos caritas contentas.
De esta forma, el alumno ha conseguido mayor motivación por cambiar y hacer cada vez más conductas adecuadas para obtener más caritas alegres, ya que lo que quiere conseguir ante todo, es bailar con la seño y poder montar una coreografía de baile juntos! jejejejejej
¡Veremos a ver donde acabamos! Pero estoy segura, que si sale todo bien, será uno de los mejores bailes de mi vida...
Os adjunto una fotografía de la economía de fichas llevada a cabo en clase. Espero que os guste.
Un saludo a todos/as.
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